Este múltiplo de valoración tiene en cuenta la perspectiva de adquisición de la compañía. Se usa al igual que los demás múltiplos para una valoración relativa, no obstante su aplicación más frecuente es para evaluar adquisiciones pasadas o futuras.
Cálculo:
EV/EBITDA = Enterprise Value / EBITDA
El Enterprise Value o Valor de la empresa se calcula como:
EV = Capitalización bursátil + Acciones preferenciales + Deuda a precios de mercado + Interés minoritario – efectivo.
EBITDA
= Earnings Before Interest, Taxes, Depreciation, and Amortization (beneficio
antes de intereses, impuestos, depreciaciones y amortizaciones).
El Valor de la empresa equivale a lo que le costaría al inversionista adquirir
toda la compañía, patrimonio y deuda; de este modo todos los activos serían del
accionista, sin participación de terceros como los bancos. El EBITDA hace
referencia a la generación de utilidad del negocio, sin ajustes contables y
antes del pago a terceros.
Bajo el EV, la compañía no tiene deuda financiera, así que se puede definir el múltiplo como los años que le tomaría al negocio pagarse solo. Una empresa con un EV de 5.000 millones y un EBITDA de 500 millones, le tomaría 5 años el pagarse solo. Esta apreciación es demasiado simple y no tendría en cuenta la perspectiva futura de la compañía.
Por lo general, un EV/EBITDA superior a 10 veces implica dos cosas o la acción está sobrevalorada o el mercado considera que tiene potencial de crecimiento. Cara es una acción con múltiplo alto, pero que en su publicación de resultados no cumple con las expectativas o cae en el EBITDA, las ventas o la utilidad neta. La acción podría continuar subiendo de precio, pese a un alto múltiplo, siempre que sus resultados sigan mostrando crecimiento.
Un EV/EBITADA bajo, por el contrario, es una empresa subvalorada o una con perspectiva de desaceleración en sus resultados. En este caso valdría la pena comprar una empresa con un EV/EBITDA bajo (3 o hasta 5 veces), siempre y cuando se crea que la compañía va a mejorar sus resultados en próximos años. De lo contrario, un múltiplo bajo solo se puede leer como el mercado descontando que los resultados van a caer en el futuro.
En el caso de adquisiciones, las empresas suelen publicar que adquirieron otra compañía y pagaron, por ejemplo, 12 veces el EBITDA. Con este múltiplo, los analistas determinan si la adquisición fue hecha a un precio justo, pago de más o la compró con descuento. Para dar una apreciación de valor sobre la adquisición, se toman las compras empresariales previas, se calcula el promedio histórico y este se toma como referencia o benchmark.